Una vez todo dispuesto la Virgen de la Amargura salía a las calles de Granada entre vitores y una salve de cohetes, a una Plaza de las Pasiegas colmada de personas al igual que durante todo el trayecto de la procesión. Antonio González pregonero de la Coronación le cantaba desde un balcón en la plaza, y no fue la única vez ya que durante varias partes del recorrido le fue cantado el himno de la coronación o la marcha dedicada por Martín Salas por el mismo motivo.
Si Granada durante estos días de las fiestas en honor al Corpus luce de manera especial, los grupos jóvenes de las cofradías se encargaron de que luciera aun más y es que los jóvenes engalanaron las calles del Realejo de una forma primorosa, con arcos y galardones, telas en los balcones o alfombra de sal para que el paso de la Virgen fuera más bello aun.
Muchos momentos se pueden destacar en la procesión: el paso por la Iglesia de San Antón, su discurrir por la calle San Matias, tanto en la Iglesia Imperial de San Matías donde María Satísima de las Penas estaba en el dintel de la puerta como en el convento de las Carmelitas Descalzas con la Virgen de la Merced y San Juan, en la Iglesia de Santo Domingo con el recibimiento de la Archicofradía del Rosario o en San Cecilio en lo más alto del Campo del Príncipe. Petaladas en muchos puntos del recorrido y ofrendas musicales de las Bandas de las Tres Caídas en Santo Domingo y de la Agrupación del Dulce Nombre en Mariana Pineda interpretando una adaptación de "Encarnación Coronada" que fue trabajada por los costaleros de la Virgen.
Practicamente todas las Hermandades de Granada acompañaron a la Hermandad en un día tan especial, incluyendo a las de Gloria y a la Patronal de Nuestra Señora de las Angustias, el cuerpo de la Policia Nacional que son Hermanos Honorarios.Tras el paso de palio la Banda de Música del Carmen de la localidad sevillana de Salteras la cual hizo gala de su buen hacer musical y abriendo calle la Banda de Cornetas y Tambores de Jesús del Gran Poder.
